La decisión
LA DECISIÓN
Protagonistas: Damon Salvatore y Elena Gilbert (Crónicas Vampíricas)
UA: Universo alternativo
Estado: Terminada
Llovía mucho aquella noche. Damon estaba en su casa,pensando que podía hacer con Elena. Desde que Stefan se había marchado,no paraba de llorar y no comía. Damon se sentía impotente. Salió de su casa enfadado hacia la casa de Elena.
- ¡Elena!-Exclama al llegar.-¿Dónde estás?-Pero no obtiene respuesta. Y sube a su habitación. La encuentra allí,pálida con la misma bandeja que él mismo le había preparado por la mañana. - Dios... ¿No has comido nada? -Pregunta,pero ella está ausente. -Si no fuese por que... -Se calla.- A veces me dan ganas de darte cachetes como a una niña pequeña.-Dice mirándola con ternura.
- Damon...-Dice saliendo de su nube.-¿Qué haces aquí? ¿No acabas de irte?
- Estás mucho peor de lo que pensaba... Llevo fuera casi cinco horas... Ni siquiera has tocado la comida. -Se acerca y coge la bandeja.-Venga,tienes que comer y no me discutas.-Dice antes de que ella pueda responderle.
- Pe-pero no tengo hambre...-Dice cuando él le mete un trozo de filete en la boca.
- O comes o juro que no te dejaré ni bañarte sola. ¿Entendido? -Suspira.
- Vale.-Dice abriendo la boca para que le de otro trozo.
Cuando se terminó la comida,Damon se quedó algo mas tranquilo. Elena estaba destrozada y en ese momento él odiaba a su hermano por haberla dejado así. Damon amaba a Elena desde el primer momento que la vio,pero Stefan se la había ganado con palabras cursis y un amor estúpido. Lo odiaba. Elena se había quedado dormida después de cenar. Y Damon se había puesto a limpiar toda la casa.
- ¿Damon? ¿Qué haces? -Dice Elena apareciendo en la cocina.
- ¿A ti qué te parece? No puedo dejar que vivas en una cochiquera... -Dice sin dejar de fregar la montaña de platos.
- No tienes que hacerlo,Damon. Ya lo haré en otro momento.
- Deja de ser tan tonta,Elena. -La mira enfadado.- No me cuesta nada hacerlo. Vete a dar una ducha,anda... -Dice mirando el pelo desordenado y la camiseta manchada de Elena. -Ahora subiré.
- ¿Porqué no dejas de tratarme como a una cría y te vas? -Dice enfadada.-Puedo cuidarme sola.
- ¿Ah,sí? Pues no lo parece.-Dice terminando de fregar.- O subes y te duchas o me encargaré yo mismo de meterte en la ducha y quitarte toda la mugre que llevas encima. -Dice intentando controlarse.
- Idiota... Ni se te ocurra subir.
Diez minutos después,Elena bajaba totalmente cambiada. Aunque seguía teniendo ojeras y se notaba la extrema delgadez que había en su cara. Damon la miraba con furia. No estaba enfadado con ella,pero sí con Stefan. Si lo encontraba,lo iba a matar...
- Elena,no puedes seguir así. -Dice mirándola.- Stefan se ha ido y no va a volver. Asúmelo.
- No...-Pone cara de dolor.-Seguro que volverá,me dijo que nunca me dejaría... Seguro que vuelve.
- No seas ingenua. Se ha ido... -Dice intentando no ser muy duro,pero no puede evitarlo.- Dijo que te quería y se marchó. Yo jamás te habría dejado.-Suspira asqueado.-¿Qué hombre te dice que te ama y luego se larga?
- ¡Stefan no es así! Seguro que le ha pasado algo... Por eso se fue...
- Si le hubiese pasado algo,yo me habría enterado. Se marchó porque quiso,Elena. Nada le impedía quedarse.
Elena rompió a llorar y Damon se dio cuenta de que había sido muy duro. Se acercó a ella y la dejó llorar hasta que se cansó. La llevó a la cama y la arropó. Se quedó toda la noche mirándola y pensando en mil formas de matar a su hermano si volvía.
Tras esa noche,la relación de Damon y Elena cambió. Elena se dejaba cuidar y empezaba a recomponerse. Tenía mejor cara e incluso sonreía de vez en cuando. Una cosa llevó a la otra y poco a poco comenzaron una relación. Damon estaba feliz,la tenía totalmente consentida y Elena cada día sonreía mas. Se había enamorado de Damon locamente.
- Te amo,Damon. Gracias por no haberme dejado nunca... -Sonríe mientras están en la cama viendo una película romántica.
- Y yo a ti...-La besa en el pelo.-Estás mas sensible de lo normal,me gusta... Eres mas expresiva.-La aprieta contra su pecho.
- Es que estas películas me ponen así... -Dice con los ojos llorosos mientras mira la película.
- Pues habrá que verlas mas a menudo... Te pones muy tontorrona. -Se ríe.
- ¡No te burles! -Le pega en el pecho.
Después de ver la película,Damon estaba en la cocina preparando la cena para Elena. De pronto,alguien entró en la cocina...
- Elena,¿no te he dicho que la cena era sorpresa? -Se gira y no era Elena,si no Stefan.
- Vaya hermanito,veo que no has perdido el tiempo... -Sonríe con maldad.
- ¿Qué haces aquí,Stefan? -Dice a la defensiva.-¿Vienes a joderle otra vez la vida a Elena?
- Vengo a recuperarla. Es el amor de mi vida. Y tú siempre has querido quitármela.
- ¡Oh,vamos Stefan! ¡La abandonaste sin darle ninguna explicación! -Dice furioso.-¿Quién crees que ha soportado sus lágrimas? ¿Quién crees que le ha dado de comer cuando parecía un zombie y se negaba a que nadie la cuidase? ¡Eres un hipócrita!
Elena que había escuchado los gritos de Damon,bajó hasta la cocina envuelta en una sábana y allí le vio.
- ¿Stefan? -Dice perpleja.-¿Qué haces aquí?
- Lo siento,Elena... Siento haberme ido...-Dice acercándose a ella.
- Estúpido...-Murmura Damon.
- Sé que hice mal,pero necesitaba tiempo para pensar... -Dice poniéndole ojitos de cordero.
- Stefan... -Lo mira con ternura.-¿Porqué te fuiste? -Le acaricia la cara.
- Visto lo visto yo sobro aquí.-Dice Damon enfadado.-Ya has demostrado como te manipula este imbécil. Ya ha vuelto,ya puedes volver con él. -Dice saliendo de la cocina muy dolido.
- ¡Damon,espera! -Pero Damon la ignora y se va a la sala a servirse un whisky.
- No debiste irte,Stefan. -Dice dolida.
- Pero tú has aprovechado el tiempo con Damon. No creo que me hayas echado mucho de menos. -Dice entre dientes viendo su desnudez a través de la sábana.
- Damon ha estado aquí,me ha apoyado siempre y... Yo...
- ¿Intentas decirme que te has enamorado de él?¿Lo eliges a él? -Dice enfadándose.
- Yo ya no te quiero Stefan. -Dice con sinceridad,aunque le duele decirlo.
- Ya veo... Al final ha conseguido tenerte... El malvado Damon se ha convertido en un corderito por amor... ¡Qué seáis muy felices...! -Dice con sarcasmo.
Cuando Stefan se fue,Elena se encontró a Damon muy borracho en el salón. Su expresión era triste y desoladora. No había querido escuchar la conversación de Elena y Stefan,así que había puesto música y se había concentrado en el fuego de la chimenea.
- ¿Damon? -Dice apagando la música y acercándose a él que está centrado en el fuego.-Damon,mírame...-Lo coge de la cara.
- ¿Qué haces aquí,Elena? -Dice sin brillo en los ojos.-Vete con Stefan,seguro que te está esperando en la puerta. No quiero una despedida cutre.
- Idiota... -Murmura.-¿Ves a Stefan en algún lado? -Sonríe.-Yo te quiero a ti... Me he enamorado de ti. Y por mucho que Stefan esté por aquí,tú eres a quien ha elegido mi corazón. Tal vez me di cuenta tarde,pero eres tú,¿me oyes?-Dice mirando su expresión de incredulidad.
- Tú... ¿Tú me amas a mi? -Dice incrédulo. -No lo creo,he visto como le mirabas.-Le aparta la cara.
- Damon,estoy aquí. Estoy contigo y te amo. ¿No lo entiendes? Soy tuya... porque me he enamorado de ti y eso no lo puedo cambiar. Tal vez una parte de mi se ha alegrado de saber que Stefan está bien. Pero yo ya no le quiero. Te amo a ti. Te elijo a ti...
- Elena...-Le coge la cara y la besa con pasión.-Soy idiota...
- Si,pero eres mi idiota...
FIN
¡Espero que os guste y dejéis comentarios!
Gracias por leernos.
Comentarios
Publicar un comentario